miércoles, 29 de agosto de 2007
1.Intro (extracto del pasodoble Gallito)
2.Delirios de grandeza
3.Tócala, uli
4.¿Dónde estás? (con Loquillo)
5.Mentiras (con Iván Ferreiro)
6.Vestida para mi
7.Cuatro rosas (con Pereza)
8.Maribel
9.Pitusa (con Jorge Drexler)
10.Suite nupcial
11.Al calor del amor en un bar (con enrique Bunbury)
12.Completamente feliz
13.¡Qué barbaridad! (con Ariel Rot)
14.Camino Soria (con Eva Amaral)
15.La culpa fue del Cha-cha-chá
16.Caray! (con Loquillo)
17.La sangre de tu tristeza (con Dani Martín)
18.Nadie me va a añorar
Bonus track
19.Tratando (con Andrés Calamaro)
171,5 Megas - 320 Kbps - Mp3 - Carátulas
Descripción:
EnJoy es el título del primer disco recopilatorio en directo de Jaime Urrutia. Grabado durante un concierto que tuvo lugar el día 20 de febrero de 2007 en la Sala Joy Eslava, donde estuvo acompañado por invitados ilustres como Ariel Rot, Amaral, Bunbury, Dani Martin (El Canto del Loco), Jorge Drexler, Ivan Ferreiro, Loquillo y Pereza, con los que repasaró sus éxitos tanto de Gabinete Caligari como de su carrera en solitario. El disco cuenta con la producción de Carlos Narea.
Comentario:
Nunca fui un ferviente entusiasta de los discos grabados en directo. Analizando las razones, creo que buena parte de la culpa de ello la tiene un vinilo que compré hace tiempo, de un concierto de los Beatles en Estados Unidos, "At the Hollywood Bowl", donde el estruendo de los chillidos de sus fans apenas deja escuchar con nitidez a un grupo embarullado y patoso, que no logra reflejar, ni por asomo, la magia que transmiten sus canciones de estudio. Ellos mismos reconocieron que dejaron los escenarios por ése motivo: simplemente no se oían. Mas lo cierto es que ese disco y algunos otros grabados en parecidas –y precarias- condiciones técnicas, me convirtieron en un acérrimo defensor de las versiones originales de las canciones registradas en la tranquilidad del estudio y "que no me las toquen ni un mínimo así". Cosas mías.
Escrúpulos musicales aparte, que, sin duda, lo han hecho esperar más en el tiempo, el caso es que ahora tienes en tus manos el primer álbum que grabo en mi carrera en la vertiginosidad y el fragor de un escenario, el del teatro Joy Eslava de Madrid. El proyecto se planteó tan claro como conciso: dar un repaso en vivo al repertorio más celebrado de mis discos, tanto con mi entrañable banda de Gabinete Caligari –¡salud, camaradas!- como en solitario, contando además con la colaboración de artistas afines a mi forma de hacer y entender la música. Una idea no por poco trillada últimamente en el mundillo discográfico, sí lo suficientemente ilusionante y arrebatadora para alguien tan poco curtido como yo en estos menesteres.
Y puedo asegurar que la elaboración de la empresa ha resultado mucho más apasionante y enriquecedora de lo que en pensé en un principio. Desde aquí, mi más sincero agradecimiento a ese público incondicional que agotó las entradas con quince días de antelación; a mis fieles Corsarios (Esteban, Germán, Ambite y Juan Carlos) y a ese gentleman de la producción llamado Carlos Narea, con los que compartí duras jornadas de ensayo en "Ritmo&Compás junto a los músicos de sesión; a todo el equipo técnico, de management y de mi discográfica; y, por supuesto, cómo no, a ese pedazo de elenco, verdadero cartel de lujo, que me arropó con un respeto y un cariño que jamás olvidaré: Iván, Rubén y Leyva, Jorge, Enrique, Ariel, Eva, Loco y Dani; junto con Andrés que, no pudiendo estar presente, me envió desde Buenos Aires su inconfundible voz para incorporarla a "Tratando". Se os aprecia, amigos.
Como no todo el mundo está en la obligación de saber inglés, aclaro, para los que no lo entiendan, que "enjoy" significa "disfrutar, gozar" en tal idioma. De ahí el juego de palabras con el nombre de la sala, que da título al disco: "Jaime Urrutia enJoy", disfruta de Jaime Urrutia. Espero que lo hagas tanto como yo, nosotros, hemos disfrutado realizándolo.
Jaime Urrutia - abril 2007
19 de febrero. Ensayo general de "Directo EN-JOY". A menos de 24 horas para el arranque de la grabación, los cables comparten el suelo con una Mahou a medio terminar. Jaime Urrutia camina por las tablas del Teatro Joy Eslava de Madrid. ¿Qué tal? "Ya en capilla"-responde con tronío mientras muestra la parte de superior de sus dientes para sonreír. Después de más de veinticinco años en la música, va a grabar su primer disco en vivo. Lo hará en su casa, en Madrid, a menos de doscientos metros de la Puerta del Sol. Más céntrico, imposible .
Son las cuatro de la tarde, iluminadores y técnicos de sonido realizan incansables una coreografía que terminará cuando el escenario esté preparado. Desde el centro, dos miembros de la banda, Germán Vilella y Ambite miran la platea del teatro con sus brazos extendidos al infinito imaginando el local lleno, como si fueran dos marinos ante la inmensidad del océano. Poco después, el contramaestre Carlos Narea, llama a la tripulación: "Corsarios, al escenario". Es la última prueba después de un mes de ensayos.
20 de febrero. "Que Dios reparta suerte, maestro", Jaime Urrutia recibe el calor de su público antes meterse en los camerinos. Entró por la salida de emergencia del teatro a las siete de la tarde para salir por la puerta grande cinco horas después. Poco antes de las 21:00, suenan los acordes del pasodoble "Gallito" y Urrutia pisa el ruedo con su gorra madrileña a modo de montera. La ovación es la primera de las infinitas muestras de cariño que recibirá el diestro durante la noche. Todo el equipo funciona como un reloj. Hasta el técnico de luces se sabe las canciones. Cerca de él, un cuarto de siglo de historia del pop español, tararea "Tócala Uli" en la zona VIP.
Hasta allí llega corriendo Ivan Ferreiro después de cantar "Mentiras". No se quiere perder ni un segundo del espectáculo. Lo mismo sucede con Bunbury, que desde la esquina más alejada escucha a Pereza pasando "Cuatro Rosas" por la coctelera Stone. Pero no solo de Gabinete vive Jaime. Su repertorio en solitario se deja ver en temas como "Maribel" o "Pitusa", que compartida junto a Jorge Drexler alcanza un punto James Taylor. Suena "Suite nupcial" y Ferreiro y Leiva se miran: "¡qué buena letra!". Bunbury ha abandonado su esquina para darse entero en "Al calor del amor en un bar", jaleada de principio a fin, y la excitación ha sido tan grande que una chica pierde el sentido. Su cuerpo estirado pasa entre los brazos del público desde las primeras filas mientras suenan los solemnes acordes de "Completamente feliz". Recupera el sentido. Justo a tiempo para asistir al punto álgido de la fiesta, que sube un grado más con la sonrisa cómplice Ariel Rot en "Qué Barbaridad" y rompe el termómetro cuando Eva Amaral se entrelaza en los graves de Urrutia para interpretar "Camino Soria". Los mismos aplausos que despiden a la zaragozana sirven para dar la bienvenida a "La culpa fue del Cha-cha-cha". ¿Aún hay más?. Claro. Loquillo, que realizó una fantasmagórica aparición en "¿Dónde estás?" interpreta "Caray" como si se la hubieran cosido a medida, y Dani Martín homenajea la figura de la primera etapa de Gabinete Caligari con "La sangre de tu tristeza". Ovación y Puerta grande. Jaime sonríe. "¿Lo habéis pasado bien? Pues entonces seguiremos haciéndolo".
Entre aplausos, los Corsarios vuelven para estrenar "Tratando", de la que Urrutia solo interpreta unas estrofas a la espera que su compadre Andrés Calamaro le de el toque de gracia desde Argentina. El espacio final es el momento perfecto para que suene la tristeza country de "Nadie me va a añorar". Por lo visto aquella noche, no parece que vaya a ser así.
Comentario:
Nunca fui un ferviente entusiasta de los discos grabados en directo. Analizando las razones, creo que buena parte de la culpa de ello la tiene un vinilo que compré hace tiempo, de un concierto de los Beatles en Estados Unidos, "At the Hollywood Bowl", donde el estruendo de los chillidos de sus fans apenas deja escuchar con nitidez a un grupo embarullado y patoso, que no logra reflejar, ni por asomo, la magia que transmiten sus canciones de estudio. Ellos mismos reconocieron que dejaron los escenarios por ése motivo: simplemente no se oían. Mas lo cierto es que ese disco y algunos otros grabados en parecidas –y precarias- condiciones técnicas, me convirtieron en un acérrimo defensor de las versiones originales de las canciones registradas en la tranquilidad del estudio y "que no me las toquen ni un mínimo así". Cosas mías.
Escrúpulos musicales aparte, que, sin duda, lo han hecho esperar más en el tiempo, el caso es que ahora tienes en tus manos el primer álbum que grabo en mi carrera en la vertiginosidad y el fragor de un escenario, el del teatro Joy Eslava de Madrid. El proyecto se planteó tan claro como conciso: dar un repaso en vivo al repertorio más celebrado de mis discos, tanto con mi entrañable banda de Gabinete Caligari –¡salud, camaradas!- como en solitario, contando además con la colaboración de artistas afines a mi forma de hacer y entender la música. Una idea no por poco trillada últimamente en el mundillo discográfico, sí lo suficientemente ilusionante y arrebatadora para alguien tan poco curtido como yo en estos menesteres.
Y puedo asegurar que la elaboración de la empresa ha resultado mucho más apasionante y enriquecedora de lo que en pensé en un principio. Desde aquí, mi más sincero agradecimiento a ese público incondicional que agotó las entradas con quince días de antelación; a mis fieles Corsarios (Esteban, Germán, Ambite y Juan Carlos) y a ese gentleman de la producción llamado Carlos Narea, con los que compartí duras jornadas de ensayo en "Ritmo&Compás junto a los músicos de sesión; a todo el equipo técnico, de management y de mi discográfica; y, por supuesto, cómo no, a ese pedazo de elenco, verdadero cartel de lujo, que me arropó con un respeto y un cariño que jamás olvidaré: Iván, Rubén y Leyva, Jorge, Enrique, Ariel, Eva, Loco y Dani; junto con Andrés que, no pudiendo estar presente, me envió desde Buenos Aires su inconfundible voz para incorporarla a "Tratando". Se os aprecia, amigos.
Como no todo el mundo está en la obligación de saber inglés, aclaro, para los que no lo entiendan, que "enjoy" significa "disfrutar, gozar" en tal idioma. De ahí el juego de palabras con el nombre de la sala, que da título al disco: "Jaime Urrutia enJoy", disfruta de Jaime Urrutia. Espero que lo hagas tanto como yo, nosotros, hemos disfrutado realizándolo.
Jaime Urrutia - abril 2007
19 de febrero. Ensayo general de "Directo EN-JOY". A menos de 24 horas para el arranque de la grabación, los cables comparten el suelo con una Mahou a medio terminar. Jaime Urrutia camina por las tablas del Teatro Joy Eslava de Madrid. ¿Qué tal? "Ya en capilla"-responde con tronío mientras muestra la parte de superior de sus dientes para sonreír. Después de más de veinticinco años en la música, va a grabar su primer disco en vivo. Lo hará en su casa, en Madrid, a menos de doscientos metros de la Puerta del Sol. Más céntrico, imposible .
Son las cuatro de la tarde, iluminadores y técnicos de sonido realizan incansables una coreografía que terminará cuando el escenario esté preparado. Desde el centro, dos miembros de la banda, Germán Vilella y Ambite miran la platea del teatro con sus brazos extendidos al infinito imaginando el local lleno, como si fueran dos marinos ante la inmensidad del océano. Poco después, el contramaestre Carlos Narea, llama a la tripulación: "Corsarios, al escenario". Es la última prueba después de un mes de ensayos.
20 de febrero. "Que Dios reparta suerte, maestro", Jaime Urrutia recibe el calor de su público antes meterse en los camerinos. Entró por la salida de emergencia del teatro a las siete de la tarde para salir por la puerta grande cinco horas después. Poco antes de las 21:00, suenan los acordes del pasodoble "Gallito" y Urrutia pisa el ruedo con su gorra madrileña a modo de montera. La ovación es la primera de las infinitas muestras de cariño que recibirá el diestro durante la noche. Todo el equipo funciona como un reloj. Hasta el técnico de luces se sabe las canciones. Cerca de él, un cuarto de siglo de historia del pop español, tararea "Tócala Uli" en la zona VIP.
Hasta allí llega corriendo Ivan Ferreiro después de cantar "Mentiras". No se quiere perder ni un segundo del espectáculo. Lo mismo sucede con Bunbury, que desde la esquina más alejada escucha a Pereza pasando "Cuatro Rosas" por la coctelera Stone. Pero no solo de Gabinete vive Jaime. Su repertorio en solitario se deja ver en temas como "Maribel" o "Pitusa", que compartida junto a Jorge Drexler alcanza un punto James Taylor. Suena "Suite nupcial" y Ferreiro y Leiva se miran: "¡qué buena letra!". Bunbury ha abandonado su esquina para darse entero en "Al calor del amor en un bar", jaleada de principio a fin, y la excitación ha sido tan grande que una chica pierde el sentido. Su cuerpo estirado pasa entre los brazos del público desde las primeras filas mientras suenan los solemnes acordes de "Completamente feliz". Recupera el sentido. Justo a tiempo para asistir al punto álgido de la fiesta, que sube un grado más con la sonrisa cómplice Ariel Rot en "Qué Barbaridad" y rompe el termómetro cuando Eva Amaral se entrelaza en los graves de Urrutia para interpretar "Camino Soria". Los mismos aplausos que despiden a la zaragozana sirven para dar la bienvenida a "La culpa fue del Cha-cha-cha". ¿Aún hay más?. Claro. Loquillo, que realizó una fantasmagórica aparición en "¿Dónde estás?" interpreta "Caray" como si se la hubieran cosido a medida, y Dani Martín homenajea la figura de la primera etapa de Gabinete Caligari con "La sangre de tu tristeza". Ovación y Puerta grande. Jaime sonríe. "¿Lo habéis pasado bien? Pues entonces seguiremos haciéndolo".
Entre aplausos, los Corsarios vuelven para estrenar "Tratando", de la que Urrutia solo interpreta unas estrofas a la espera que su compadre Andrés Calamaro le de el toque de gracia desde Argentina. El espacio final es el momento perfecto para que suene la tristeza country de "Nadie me va a añorar". Por lo visto aquella noche, no parece que vaya a ser así.
Angel Carmona
0 comentarios:
Publicar un comentario